Tiene poco que me sumergí en el mundo de los dorama. Cansada
de lo mismo de siempre en la televisión local y en la de paga decidí darle una
oportunidad a los coreanos y hacer a
un lado a las series norteamericanas.
Como muchas cosas coreanas que me gustan, fue por accidente
que me topé con una página de doramas traducidos al español; yo en realidad
estaba queriendo regresar a mis orígenes de otaku. Por cuestiones que yo misma
desconozco, dejé de ver anime por más de un año, por lo que nostálgica busqué
una página en donde pudiera ver Soul Eater, aquél anime que había dejado
pendiente. Esa página también tenía una
de doramas y me dije: ¿Por qué no? La guardé en favoritos y después de un
tiempo me decidí por ver algunos.
Seleccioné algunos por la trama y otros porque en ellos
aparecían miembros de una mis bandas favoritas de Corea de Sur: Super Junior;
después de ver algunos capítulos, fui desechando doramas y así fue como llegué
a una gran historia: Scent of a woman.
¿Qué puedo decir de éste dorama? …simplemente…Precioso,
magnífico…bueno…
Soy una mujer que no le gustan las cursilerías y evita las
historias de amor, pues siempre están llenas de clichés, adivino que es lo que
van a decir o va a suceder y…asco. Pero me topo con este dorama.
Uau, fue lo que dije, igual que Anastasia Steel. La trama es sencilla y muchos dirán: Típico,
clásico, etc. Pues sí, el centro de la
trama no es compleja, lo interesante y lo que hace la esencia del dorama son
los personajes, los diálogos, la música de fondo y los actores.
Scent of a woman narra la vida de una mujer de 34 años
mezquina, que sólo se dedica a trabajar para vivir míseramente con su madre y
guardar todo su dinero para…quién sabe. Lee Yeon Jae vive soportando las humillaciones de sus
compañeros y el acoso sexual de su jefe, es una mujer que pasa desapercibida
por mucha gente. Todo cambia después de un accidente en el que, después de
hacerle algunos estudios, el doctor que la atiende (que por cierto resulta ser
su amigo de la infancia) descubre un tumor maligno. Al tener tan sólo unos meses de vida, Lee Yeon
Jae decide dejar de lado su trabajo y se dedica
a vivr, algo que no había hecho por mucho tiempo.
Kang Ji Wook es
el hijo único del dueño de la empresa en donde trabajaba Lee Yeon Jae y al que
forzan a casarse con la hija de uno de
los hombres más poderosos de Corea del Sur. Por cuestiones del destino, algo
que simples mortales como nosotros no logaremos entender, Lee Yeon Jae y Kang Ji Wook se conocen y aunque ellos deciden alejarse
uno del otro, el destino lo obliga a reencontrarse una y otra vez, provocando
que se enamoren.
La actuación de
Lee Dong Wook es magnífica, ahí fue donde conocí a éste gran actor y no se puede comparar para nada a
actores que nos presentan en novelas
mexicanas como aquél hombre que ni mexicano es, me refiero al cubano William
Levy. Kim Sun Ah no se queda nada atrás, el cambio que hace de apariencia se ve
coherente y no exagerado como pasa en las novelas de mi país. El resto del
elenco, bueno…¡todos magníficos!
Si deseas reír,
llorar, suspirar y disfrutar del tango, no te puedes perder éste gran dorama.
Tal vez muchas
personas creerán que soy malinchista, no, no lo soy, amo a México pero me
entristece, me enfurece que haya taaanto talento y lo ignore o lo desperdicien con tramas tontas o
con refritos.
Me disculpo por
mi muy mala redacción, pero me siento con coraje y frustración y…por qué no,
también me siento triste y la única manera en la que me puedo desahogar es
escribiendo.
Ay, es verdad, acá pasa lo mismo con las novelas nacionales, son pura mierda, a excepción de algunas pocas producciones humorísticas, que son geniales, pero pura mierda también xDDD
ResponderBorrarVeré si hago tiempo tu dorama y despues hablamos sobre ella :D